Impacto de la IA, escasez de talento y flexibilidad laboral en 2024
Este año estuvo marcado por la disrupción tecnológica, el retorno a las oficinas y la escasez de talento especializado, desafiando la gestión del trabajo.

El 2024 se destacó por ser un año lleno de cambios significativos en el entorno laboral. La implementación de nuevas tecnologías, la creciente demanda de profesionales especializados y el debate sobre la presencia en los lugares de trabajo marcaron la pauta en este periodo.
Estos factores no solo afectaron a las organizaciones, sino que también transformaron la relación entre empleadores y empleados. Una de las principales tendencias que se hicieron notar en 2024 fue la adopción acelerada de la inteligencia artificial (IA).
Desde DHR Global se destacó que el uso de esta tecnología para el análisis de información y la resolución de problemas se volvió más común en las empresas. Esto plantea nuevos retos para la fuerza laboral, que debe estar en constante aprendizaje para adaptarse a estas herramientas.
A pesar de las inquietudes que genera el impacto de la IA en el aumento de las cargas de trabajo y los posibles sesgos en las empresas, también se observó una mejora en la percepción de los trabajadores hacia los beneficios de la IA generativa (GenAI), según la última Encuesta sobre esperanzas y temores de la fuerza laboral de PwC.
Retorno a las oficinas
Otro aspecto que dejó su huella en el ámbito laboral en 2024 fue el retorno masivo a las oficinas, tendencia impulsada en gran medida por la decisión de los líderes empresariales. De acuerdo con el informe Tendencias de talento, de PageGroup, 52% de los trabajadores que volvió al trabajo presencial lo hizo debido a un endurecimiento de las políticas internas de su empresa.
El Colegio de Innovación en Recursos Humanos (CORH) subrayó que esta situación generó un debate entre el deseo de los trabajadores de contar con flexibilidad laboral y la necesidad de las empresas de contar con el mejor talento de manera presencial.
Afirmó a El Economista que persuadir a las organizaciones para que aceptaran esquemas de trabajo más flexibles no fue una tarea sencilla, y que las personas mostraron resistencia a ceder en cuanto a la presencialidad en sus labores.
Desafíos en la búsqueda de talento especializado
La llegada de nuevos competidores debido al nearshoring, el avance de la digitalización y los cambios en las expectativas de los profesionales contribuyeron a consolidar la escasez de perfiles especializados como uno de los principales desafíos en el ámbito laboral en 2024.
Así, los especialistas sugirieren que las empresas deberían ampliar su búsqueda de talento, manteniendo la alineación de los perfiles a los requerimientos del negocio, pero evitando ser tan estrictos y limitando el acceso a nuevos perfiles. Esta apertura implica estar atentos a las dinámicas del mercado sin caer en extremos.
Reevaluación de la oferta de valor
La escasez de talento especializado no solo se traduce en un reto para las empresas, sino que también exige una reevaluación de su oferta de valor en función de los nuevos intereses de los colaboradores. En este contexto, las organizaciones deben adaptarse a esquemas más flexibles y considerar el bienestar físico y mental de sus empleados como un aspecto prioritario.
Además, la competencia por el talento especializado no solo se intensificará en 2025, también demandará un mayor esfuerzo por parte de las empresas para invertir en el desarrollo del talento interno, especialmente en un panorama donde escasea la disponibilidad de perfiles calificados en el mercado.