Deuda mundial alcanza récord histórico de 318 billones de dólares
En 2024, la deuda mundial alcanzó un récord de 318.4 billones de dólares, 7 billones más que en 2023, con incrementos para los hogares, las empresas, los gobiernos y los bancos.

La deuda global alcanzó la cifra récord de 318 billones de dólares (bdd) a finales del 2024, marcando un nuevo hito para el cierre del año, de acuerdo con los datos presentados por el Instituto Internacional de Finanzas (IIF).
El total de deuda acumulada por hogares, empresas, bancos y gobiernos de todo el mundo aumentó 7 bdd en el cuarto trimestre de 2024, en comparación con los 311.2 bdd registrados en el mismo periodo de 2023.
El aumento en la deuda global fue impulsado por las economías emergentes, que ampliaron su pasivo agregado a 103.7 bdd, en contraposición a los 99.3 bdd del año anterior.
Por su parte, las economías avanzadas también experimentaron un crecimiento en su volumen de deuda, alcanzando los 214.3 bdd, frente a los 211.9 bdd registrados en 2023.
Mayor incremento en cinco países
El informe observa un aumento en el endeudamiento de hogares, empresas, gobiernos y sector financiero, particularmente en China, India, Arabia Saudí, Turquía, Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Suecia.
A pesar del crecimiento en la deuda, se observó una moderación en el apalancamiento global en comparación con años anteriores, debido a la incertidumbre en las políticas comerciales y de inmigración de Estados Unidos, así como a las expectativas de cambios en las tasas de interés.
El informe también destaca un aumento en la relación entre la deuda y el Producto Interno Bruto (PIB), que alcanzó el 328% a finales de 2024, influenciado por un menor crecimiento económico y una relajación de las presiones inflacionistas.
Para el primer semestre de 2025, el IIF prevé una moderación en el alza de la deuda, con un enfoque más cauteloso por parte de los prestatarios. Anticipa que la deuda pública seguirá aumentando en 2025, en especial en Estados Unidos, China, India, Francia y Brasil.
Además, el ente económico espera una emisión récord de pasivos por parte de naciones emergentes, aunque advierte sobre posibles desafíos de liquidez debido a tensiones comerciales y cambios en la ayuda exterior de Estados Unidos.