La ofensiva de Trump contra los programas DEI

En Estados Unidos, los programas y políticas relacionados con la diversidad, equidad e inclusión (DEI) han enfrentado un sólido cuestionamiento en la administración del presidente Donald Trump, quien ha señalado estas iniciativas como "ilegales".

Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump firmó un decreto que declara ilegales dichos programas y políticas dentro del país. Esta medida provocó la suspensión de todos los funcionarios y empleados vinculados a estas iniciativas, quienes han sido sometidos a una licencia administrativa forzada con el objetivo de ser despedidos en un plazo de 60 días.

Además, se ha instado a diversos ministerios a denunciar cualquier intento de mantener en secreto actividades relacionadas con los programas DEI. El derrocamiento de estos programas no se limita a un ámbito particular, ya que también abarca la derogación de un decreto de 1965 que prohibía la discriminación en el ámbito laboral en empresas contratadas por el Estado.

Esta acción representa una controversia en la reconfiguración de las políticas DEI en el país. El nuevo jefe del Pentágono, Pete Hegseth, expresó de manera contundente que las instrucciones del presidente Trump son claras: la eliminación de los programas DEI en el ámbito militar.

Caber recordar que hace unos días el presidente dijo que “la política oficial del gobierno de Estados Unidos será que sólo existen dos géneros, masculino y femenino”. Estas declartaciones ya anticipaban que su segundo mandato activaría políticas discriminatorias en contra de minorías, así como de la diversidad de género y sexual.

La embestida contra los programas DEI ha generado reacciones encontradas en la opinión pública. Mientras algunos celebran el enfoque del presidente Trump, otros advierten sobre las implicaciones que esta ofensiva puede tener en la promoción de la diversidad y la inclusión en diversas esferas de la sociedad estadounidense.