Nearshoring en México: Oportunidad para crecimiento económico y cuidado ambiental en empresas relocalizadas
El Nearshoring presenta oportunidades y retos para México, vinculando el crecimiento económico con el cuidado ambiental y el acceso a recursos como energía y agua.

La relocalización de empresas extranjeras, conocida como Nearshoring, ha generado un aumento en la conversación sobre el traslado de cadenas de valor de Estados Unidos a México y otros países. Este fenómeno se ha visto impulsado por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, donde el país vecino busca diversificar sus lugares de producción, priorizando la colaboración con países aliados. Sin embargo, este crecimiento económico debe ir acompañado de un compromiso con el cuidado del medio ambiente y la cohesión social, en un contexto en el que México se posiciona como un actor clave.
Desafíos del Nearshoring en México
Fibra Uno, empresa dedicada a proveer infraestructura eficiente e integral, ha destacado la importancia de equilibrar el crecimiento económico con la protección medioambiental y la cohesión social. En este sentido, se identifican tres principales retos de carácter socioambiental que enfrenta el Nearshoring en México: acceso a energía, disponibilidad de agua y fuente de trabajo. El acceso a energía representa un desafío significativo, dado el aumento del consumo del Sistema Eléctrico Nacional y la necesidad de invertir en energías limpias para capitalizar el Nearshoring. Por otro lado, la disponibilidad de agua se presenta como un reto en el norte y centro del país, zonas estratégicas para la relocalización, pero con un potencial de crecimiento en la región sur-sureste. Por último, la fuerza de trabajo se convierte en un factor clave para el éxito del Nearshoring en México.
El acceso a energía representa un desafío significativo, dado el aumento del consumo del Sistema Eléctrico Nacional y la necesidad de invertir en energías limpias para capitalizar el Nearshoring. La disponibilidad de agua se presenta como un reto en el norte y centro del país, zonas estratégicas para la relocalización, pero con un potencial de crecimiento en la región sur-sureste. Por último, la fuerza de trabajo se convierte en un factor clave para el éxito del Nearshoring en México.
Es importante destacar que, para hacer frente a estos desafíos, es crucial que las empresas que se instalen en México impulsen e implementen el uso de nuevas tecnologías que promuevan la eficiencia y el reúso. En este sentido, las plantas de tratamiento de agua y los pozos de absorción para re infiltrar el agua en subsuelo serán fundamentales. Asimismo, la inversión público-privada en todos los eslabones de las cadenas de hidrocarburos como de electricidad es esencial para garantizar el acceso a energía confiable, con la menor huella de carbono posible y a precios competitivos.
La relocalización de empresas extranjeras en México implica una oportunidad para equilibrar el crecimiento económico con el cuidado al medio ambiente y la cohesión social. El Nearshoring representa un desafío en términos de acceso a energía, disponibilidad de agua y fuerza de trabajo. Sin embargo, con la implementación de tecnologías eficientes y el impulso de inversión en infraestructura energética, México puede posicionarse estratégicamente como un actor clave en el ámbito del Nearshoring, sin descuidar su compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social.